Viajamos a través de este post hasta el Reino Unido, porque es justamente allí donde hemos encontrado una casa que estamos seguros os va a inspirar tanto como a nosotros. Una casa ahora, porque en su momento fue una capilla.
Lo que ves en las imágenes, antes era una capilla. Pero, tras pasar por las manos de algunos profesionales, por el resultado los calificaríamos de grandes profesionales, se ha convertido en la espectacular casa vacacional de lujo que nos devuelven las fotografías hoy.
Techos altos, luz natural que inunda todas las estancias, un espacio diáfano y un toque muy actual… ¡Suficientes motivos para enamorarnos y convencernos de entrar y conocer el resto!
El equipo encargado de la rehabilitación de esta antigua capilla del siglo XIX, se ha encargado de darle ese aire actual del que hablábamos, pero conservando la esencia de los detalles arquitectónicos de la construcción original. Y lo ha logrado de una manera realmente exquisita a pesar de la necesidad de sustituir prácticamente todos los elementos interiores, debido a su estado, tras años de abandono y deterioro.
Resulta sorprendente la sutileza con la que ha sido creada una casa actual y moderna que a la vez conserva esa esencia rural, rústica y tradicional del entorno… Una mezcla y fusión perfecta de elementos y estilos que convierten a esta casa en un lugar absolutamente especial y encantador.
Para aprovechar el espacio vertical que ofrece una construcción como una antigua capilla, se ha creado una entreplanta en la que se han ubicado tres dormitorios…
Y parece que han pensado en todo, porque, aunque se trata de una casa vacacional, han aprovechado la bajada de la escalera para ubicar en este espacio una pequeña zona de trabajo, optimizando al máximo el espacio y ofreciendo comodidad a todo tipo de huéspedes, incluso aquellos que necesitan trabajar incluso de viaje.
Definitivamente nos apasiona el juego de contrastes con el que se ha decorado toda la casa, con la madera y el color blanco como protagonistas.
Nosotros pasaríamos encantados, sin duda, unos días en esta casa… ¿Y tú?